ELABORACIÓN

La fabricación del queso es muy sencilla, basta con hacer fermentar la leche y dejarla reposar hasta que consiga la consistencia deseada. Por tanto, la coagulación es el proceso fundamental de esta ancestral tarea. Como ocurre con el resto de los quesos, el Ibores ha de sufrir una serie de transformaciones para que su resultado sea óptimo.



El proceso está compuesto por varias operaciones: desuerado, moldeado, prensado, salado y maduración. Las condiciones de elaboración han experimentado una gran evolución con el paso del tiempo. Se siguen empleando las técnicas artesanales cargadas de tradición, pero se han creado queserías que permiten una producción enorme.



Todo esto, unido a las nuevas tecnologías y modernas instalaciones con las que cuentan, permite que este producto presente unas extraordinarias garantías de calidad y sanidad.


Características
Zona de producción

Versión imprimible